Terminamos el año litúrgico con la fiesta de Cristo Rey. Un título hermoso para el Señor que es buen pastor, el mejor maestro, nuestro sumo sacerdote y el último profeta. En esta última celebración del calendario litúrgico le saludamos y celebramos como nuestro Rey.
Día de LOS SIN TECHO. Día de CRISTO REY. Qué tendrá que ver una cosa con otra? Cristo Rey el emigrante, el del pesebre, perseguido.
El reino de Jesús no es el de Pilato. El prefecto vive para extraer las riquezas y cosechas de los pueblos y conducirlas a Roma. Jesús vive «para ser testigo de la verdad».
Su vida es todo un desafío: «todo el que es de la verdad, escucha mi voz». Pilato no es de la verdad.
No escucha la voz de Jesús. Dentro de unas horas, intentará apagarla para siempre.
El seguidor de Jesús no es «guardián» de la verdad sino «testigo». No ha venido tras las huellas de Jesús para ser legionario sino discípulo. Su quehacer no es disputar, combatir y derrotar a los adversarios, sino vivir la verdad del evangelio y comunicar la experiencia de Jesús que está cambiando su vida.
El cristiano tampoco es «propietario» de la verdad, sino testigo. No impone su doctrina, no controla la fe de los demás, no pretende tener razón en todo. Vive convirtiéndose a Jesús, contagia la atracción que siente por él, ayuda a mirar hacia el evangelio, pone en todas partes la verdad de Jesús. La Iglesia atraerá a la gente cuando vean que nuestro rostro se parece al de Jesús, y que nuestra vida recuerda a la suya.
José Antonio Pagola
PARA LA EUCARISTÍA DE NIÑOS
Oración al crucifijo:
Sabes, Jesús, mi amigo tiene colgado en la pared de su habitación un crucifijo/ y una chica de mi barrio lo lleva colgado al cuello. / Los dos son muy bonitos,/ verdaderas obras de arte. / El otro día monté en el autobús y un joven lo llevaba en la oreja./ Hace unos días estuve jugando con mis amigos,/ cuando volví a casa mi madre me dijo: / Vienes hecho un Cristo”
Y ahora me dicen/ que este par de palos cruzados con un colgajo de metal/ es un Cristo.
Los niños de catequesis sabemos hacer todos la señal de la cruz./ La catequista nos dice que algún día entenderemos que tú/ subido a la cruz/ eres nuestro rey / y acoges desde tú trono / a tantos niños que mueren después de malvivir,/ acompañas la soledad de hombres y mujeres que no encuentran sentido a sus vidas, / vigilas nuestro mundo/ y te haces solidario / con todos los que desean hacer de nuestro mundo/ un lugar de felicidad.
Jesús, los niños de la Parroquia……, queremos que seas nuestro rey.