EL DOMINGO DE LA ALEGRÍA
Domingo «gaudete». Procede de la primera palabra latina, gaudete, en la antífona de entrada de nuestra misa de hoy, de la Carta a los Filipenses: “Estad siempre alegres en el Señor, os lo repito: estad siempre alegres. El Señor está cerca”. Alegres, siempre alegres esperamos al Señor, que hecho Niño viene a salvarnos. Alegría, paz, amor, esperanza… Esperamos, no como quien desespera sino como quien da saltos de alegría porque aquel a quien espera esta seguro de que viene.
Él viene, viene, viene siempre.
» ¿ No oíste, sus pasos silenciosos ?
Él viene, viene, viene siempre.
En cada instante y en cada edad, todos los días y todas las noches,
Él viene, viene, viene siempre.
He cantado muchas canciones y de mil maneras ;
pero siempre decían sus notas :
Él viene, viene, viene siempre.
En los días fragantes del soleado abril,
por la vereda del bosque,
Él viene, viene, viene siempre.
En la oscura angustia lluviosa de las noches de julio,
sobre el carro atronador de las nubes,
Él viene, viene, viene siempre.
De pena en pena mía,
son sus pasos los que oprimen mi corazón,
y el dorado roce de sus pies es lo que
hace brillar mi alegría.»
( de » Rabindranath Tagore, Cuentos Elegidos «, Ed. Errepar ).