DOMINGO VIº de PASCUA: 22 de Mayo de 2022.
«El que me ama guardará mi Palabra y mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada en él».
¿Cómo hacer de nuestra vida crsitiana, diaria, una Vida Pascual? Cristo Resucitado nos ayuda a dejar el hombre viejo, egoísta, para que renazca en nosotros el hombre bautismal, el hombre nuevo: el hombre renacido vive de la fe, ama como Jesús, escucha la Palabra de Dios y obedece; vive unido a todos en actitud de servicio…es la vida resucitada mientras peregrinamos hacia la Plenitud del Reino.
La primera lectura presenta la vida en la Iglesia primitiva; no es una Comunidad idílica; entre los Apóstoles y los discípulos hay discusiones, diferencias; dan un paso adelante en la ruptura con el judaísmo e inician la identidad cristiana: «Hemos decidido el Espíritu Santo y nosotros, no imponeros más carga que las indispensables: que no os contaminéis con la idolatría…y que os abstengáis de la fornicación». (1ª lectura).
La lectura del Apocalipsis nos presenta la Iglesia futura, luminosa y bella; tndrá dos peculiaridades: estará cimentada en los 12 apóstoles y será fuerte porque la habita la Gloria de Dios. (2ª leca).
Jesús en su despedida, nos deja como testamento tres bienes a los discípulos: la predilección del Padre que habita en los que guardan su Palabra. El segundo, si somos fieles al don del Espíritu Defensor, que «será quien os lo enseñe todo y os vaya recordando todo lo que yo os he dicho». El tercero el compromiso de vivir en el Amor como fuente de Paz que el mundo no os da: «la Paz os dejo, mi Paz os doy»…que no tiemble vuestro corazón, ni se acobarde» (Evangelio).
¿Tenemos miedo al futuro?, ¿nos aterra la nueva sociedad que está surgiendo?; el miedo paraliza; la fe en Jesús Resucitado, que permanece con nosotros, nos hace fuertes para la misión y para ivir alentados por la esperanza en Él «porque ilumina su rostros sobre nosotros…que canten de alegría las naciones» (Salmo 66).
Jaime Aceña Cuadrado cmf.