EL DOMUND Y EL AÑO DE LA FE
Este 21 de octubre –bajo el lema de “Misioneros de la Fe—se celebra el Jornada Mundial de las Misiones. En España toma la denominación de «Domund» y es una gran fiesta de amor y solidaridad con una gran tradición en nuestro país. Antiguamente se llamaba Domingo de la Propagación de la Fe, y de ahí vino el nombre de “Domund”.
Javier era un niño enfermo y su médico no le dejaba salir de casa porque el sol y el viento le podían matar. Se tenía que contentar con ver y hablar con los que pasaban debajo de su ventana: el lechero, el anciano, el cartero, los niños que iban y venían de la escuela y la niña que vendía flores.
Un día se enteró de que en el edificio grande que se levantaba enfrente de su ventana vivía el cartero del rey y desde aquel día su único deseo era recibir una carta del rey. Era un derecho que nadie le podía negar. Y un buen día cuando entró en agonía, entre sueños, oyó una voz que le anunciaba la llegada del gran rey.
Esta puede ser la historia de este domingo, domingo del Domund, día mundial de oración por las misiones.
Cuántos niños, cuántos jóvenes, cuantos hombres y mujeres en nuestra comunidad y en todos los continentes están deseando recibir una carta del Rey.
Nosotros, los que nos reunimos aquí todos los domingos, sabemos que ese gran rey existe, sabemos que hemos recibido su carta y su visita, sabemos que «de muchos modos y en múltiples ocasiones ha hablado a los hombres», sabemos que «en los últimos tiempos envió a su propio hijo» como gran cartero de su Padre Dios. Y sabemos que su palabra, su carta, no es letra muerta, sino «vida y vida abundante», y sabemos que ese hijo, Jesucristo, es para nosotros y para todos y que todos tienen derecho a recibir esa carta, su visita y su abrazo.
Jesús es un derecho de todo hombre.